lunes, 22 de junio de 2009
Dios
martes, 16 de junio de 2009
Maravillas de la fisicoquímica moderna
jueves, 4 de junio de 2009
Bueno. Sin palabras. Acontecimiento histórico. Dudo mucho que lo libros de texto lo recojan algún día. Los libros especializados harán una breve referencia. No creo ni que estén en la misma página. Quizá en alguna de esas tablas de relleno de algún manual de historia. Hecho en España, claro. Y como hecha en España está Leire Pajín. Y es que son unos átomos "CHONPS" muy especiales los que nos forman. Un principio de incertidumbre que sale de lo pequeño, muy pequeño, y se hace director de nestros rumbos históricos.
Esto parece de nuevo las dos eternas Españas de Machado. Estereotipadas hasta en los pelos del bigote. O españolistas de pro, superiores por el hecho de tener una historia épica (igual de desgraciada de casi todos los países, llena de mentiras como las de casi todos también) y por llevar "la sangre y el oro" en la bandera, o españolistas pesimistas, pre-europeos eternos.
Aquí se han cambiado las tornas. Los que solían ser los pesimistas se han vuelto españolocentristas, con el convencimiento de que manejamos el mundo, de que nuestro presidente se encuentra entre esos cuatro que lleva las cuerdas deesta marioneta "planetaria". ues bien, España es una auténtica mierda. En realidad casi todos los países lo son, unos lo disimulan más (como Italia) y otros menos (como todos los Áfricanos o de los Urales para el este).
Aquí en realidad. quien maneja el mundo es Estados Unidos. No descubro nada nuevo. Esto no es un análisis político novedoso, que me convierte en tertuliano de 59 segundos. Claro está que China, Rusia, incluso Gran Bretaña puden vetar resoluciones de los Estados Unidos, Venezuela y la Liga Árabe pueden presionar con el petróleo y demás. Pero no es a eso a lo que me refiero. Es la capacidad de Estados Unidos de dirigir el progreso, de dirigir el conocimiento, de dirigir la civilización. Construida, claro está, con ciudadanos de todo el mundo, que lo son todo (un escaso porcentaje de la población americana) bajo las barras y las estrellas, y que no son nada en el resto del "planeta".
De todas formas, si nos queremos autoconvencer de nuestra importancia en el mundo, podemos hacerlo sin recurrir a infantilismos del tipo "Pues mi padre no es el mejor del mundo, es el mejor del universo"