sábado, 30 de mayo de 2009

Miscelánea

El rocío me parece una mierda y una payasada. Payasada como casi todas las fiestas religiosas, por lo menos de Madrid (no por nada) para abajo. No entiendo el fervor, el dineral, los trajes, los gritos, las canciones diafragmáticas y el olé olé olé. Pero no sólo es un problema de forma, sino también de fondo. De fondo religioso. Eso es otra cuestión.

Quizá vayan todos hasta el culo de drogas, exógenas o endógenas (me tomo la licencia con esto último de violar la propia definición de drogas). Las drogas son esas sustancias que tienen la capacidad de hacerte feliz durante minutos y desgraciado durante horas o días. Hay a quien le destroza la vida: gente que lleva fatal convertirse en desgraciado horas y días por algo de felicidad diferente. Pero también hay quien es un desgraciado a todas horas y le apetece ser feliz unos minutos. La decisión es suya. ¿Pero esto es así? ¿Es una decisión puramente personal, que forma parte de la libertad individual?Puede. Sin embargo es un elemento perjudicial parala sociedad. La droga convierte gente potencialmente constructiva en gente no constructiva o incluso destructiva. ¿Pero es un efecto únicamente intrínseco? o también: ¿Qué mas da?. El personaje que decide ser un vago y no hacer nada no va a la cárcel. No es ilegal. ¿Entonces?

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